Todo lo que necesitas saber
Las joyas bañadas en oro son una opción atractiva para quienes desean lucir piezas de aspecto dorado sin el coste de una joya de oro de varios quilates. Este tipo de joyería combina la elegancia del oro con un precio más accesible, ofreciendo un equilibrio entre belleza y economía.
Las joyas bañadas en oro se fabrican a partir de una base de metal, como cobre, latón o plata, recubierta con una fina capa de oro mediante un proceso de galvanización o electrochapado.
Gracias a este proceso, la pieza tiene un acabado dorado y brillante similar al de una joya de oro puro, sin ser completamente de este metal. El grosor de la capa de oro puede variar, lo que influye en la durabilidad de la joya y en su resistencia al desgaste diario.
Las joyas bañadas en oro presentan varias ventajas que las convierten en una excelente opción para muchas personas:
Más asequibilidad: Las piezas bañadas en oro ofrecen la apariencia del oro a un precio mucho más bajo que las de oro, lo que permite disfrutar de una joya elegante sin hacer una gran inversión.
Gran versatilidad de estilos: Gracias al proceso de baño en oro, es posible encontrar una amplia gama de diseños, desde los clásicos hasta los más modernos y varias tonalidades de colores, desde el clásico oro amarillo al atrevido oro rosa. Esto permite adaptar el estilo a diferentes ocasiones, incluso para hacer alianzas de boda, y gustos personales.
Peso más ligero: Al estar hechas con una base de metal diferente, suelen ser más ligeras que las piezas de varios quilates de oro puro, lo que las hace cómodas de llevar.
Almacenamiento adecuado: Saber como guardar joyas de manera correcta es clave para evitar que se rayen o se desgasten innecesariamente. Idealmente, cada pieza debe guardarse por separado en una bolsa de tela suave o en un compartimento individual de un joyero, sobre todo en piezas más especiales como un anillo de compromiso. Esto evita el roce entre piezas y además las protege de la humedad.
Limpieza profunda ocasional: Realiza una limpieza más profunda una vez al mes o cuando sientas que han perdido brillo. Prepara una mezcla de agua tibia con unas gotas de jabón suave. Sumerge las joyas durante unos minutos, enjuágalas y sécalas con un paño delicado. Recuerda no usar productos abrasivos, cepillos duros o limpiadores de joyas que no sean específicos para piezas delicadas. Otra opción es llevarlas a un joyero para que realice una limpieza de joyas profesional cada varios meses.
Hacer una reaplicación del baño de oro: Con el tiempo, es natural que las joyas bañadas en oro pierdan parte de su capa dorada, sobre todo en las áreas de más contacto. Si notas que tus joyas han perdido mucho el color dorado, considera llevarlas a una joyería donde puedan reaplicarles el baño de oro. Este servicio, llamado rechapado, permite renovar el aspecto de la pieza y devolverle su brillo y elegancia original.
Con el tiempo, es normal que las joyas bañadas en oro pierdan algo de su brillo o incluso se oscurezcan cuando se utilizan de forma continua. Esto ocurre porque la fina capa de oro puede desgastarse, dejando expuesto el metal base. A diferencia de las joyas de oro, que no se ven afectadas por la oxidación, las joyas bañadas en oro tienen una capa fina de este metal, por lo que pueden presentar desgaste, decoloración o incluso oscurecimiento debido al contacto con el entorno y el uso diario.
El motivo principal por el que las joyas bañadas en oro se ponen negras es el desgaste de la capa de oro, que puede irse perdiendo con el tiempo y dejar al descubierto el metal base si no se sabe bien como limpiar joyas bañadas en oro ni cuáles son sus cuidados. Cuando este desgaste ocurre, el metal de base (como cobre, latón o plata) queda expuesto y reacciona con el oxígeno, la humedad y otras sustancias presentes en el ambiente, provocando una oxidación que da lugar a ese oscurecimiento o ennegrecimiento característico.
Factores como la exposición al sudor, perfumes, productos químicos y la humedad pueden acelerar este desgaste y provocar que se pongan negras. Sin embargo, con los cuidados adecuados, es posible alargar su vida útil y mantener su buen aspecto.
Con plazox podrás aplazar tus compras en 3,6,9 y 12 meses con tus tarjetas de crédito de las entidades adheridas
Para más info consulta tu banco
*Consulta las entidades adheridas en: sistemapay.com/plazox