Hay muchos tipos de joyas, pero sólo unas pocas tiene el honor de ser recordadas durante años y pasar a la posteridad.
Nosotros nos hemos propuesto recopilar algunas de las más importantes: aquellas que brillan hoy en día por sus apasionantes historias, por su deslumbrante belleza o por su valor incalculable.
Ya hemos hablado en otros artículos de las joyas de la princesa Diana, pero no podemos evitar volver a hablar de su anillo de compromiso, sin duda una de las joyas históricas y anillos de lujo más famosos.
El anillo se compone de un zafiro Ceylon de 18 quilates rodeado por 17 diamantes brillantes. En su momento lo adquirió la familia real por 60.000 dólares, que al cambio de hoy en día y tras su revalorización costaría en torno al medio millón de euros.
Fue todo un hecho histórico cuando lo eligió Diana, y más tarde, cuando William se lo ofreció a Kate, se convirtió definitivamente en un legado de la joyería y una de las joyas famosas de la historia.
Valorado actualmente en más de 18 millones de dólares, este anillo se cree que perteneció a la princesa Matilde Bonaparte, sobrina de Napoleón Bonaparte y miembro de la familia real rusa.
Su precio y valorización se debe, a parte de su importancia histórica, a la piedra de 8,72 quilates del centro del anillo. Otra de las joyas históricas y una de las joyas famosas de la historia de la joyería que fue importante en su época.
Sin duda el diamante más famoso y misterioso del mundo, una joya histórica y una de las joyas de diamantes más famosas del mundo.
Este diamante cuenta con un peso de 45,52 quilates y es el diamante azul más grande del mundo.
Su historia es bastante trágica en realidad, ya que se dice que sobre él pesa una maldición.
Su historia en Europa comienza en el siglo XVII de la mano de Jean Baptiste Tefernier, un contrabandista francés, que poco después de obtener el diamante, durante un viaje a la India, fue atacado por una manada de perros que acabaron con su vida.
El diamante pasó a la familia real francesa, en concreto al rey Luis XIV. Sabiendo de la maldición, Luis XIV intentó terminar con ella reduciendo su peso de los originales 112,5 quilates a 67,5. Poco después, fue prestando esta joya a varios de sus amigos y familiares.
El primero fue Nicholas Fouquet, que fue acusado de malversación de fondo y condenado a cadena perpetua. La princesa Lambrelle lo lucía muchísimo, y terminó apaleada por el pueblo en la Revolución Francesa, mientras que Luis XIV terminó arruinado y despreciado.
A finales del siglo XX, el diamante Hope adquirió su nombre al ser comprado por Henry Thomas Hope, un banquero y coleccionista. Tiempo después él y su familia quedó arruinada por sus malos negocios. Otro de los dueños más contemporáneos fue Ned McLean, que poco después de comprarlo su hijo murió en un accidente de coche, y su otra hija lo hizo por sobredosis. Finalmente, McLean acabaría en un manicomio. El diamante acabó como herencia para sus nietos, siendo la última dueña de la familia Evalyn McLean, que apareció muerta en su apartamento, sin causa aparente con apenas 25 años.
Su último comprador fue Harry Winston, que lo adquirió para venderlo al Smithsonian. Actualmente se encuentra en el Museo Nacional de Historia Natural de la Institución Smithsoniana.
Seguimos hablando de joyas históricas, y no podía faltar el famoso collar de María Antonieta, reina francesa que gobernó durante el siglo XVIII hasta la llegada de la Revolución Francesa.
Aunque lo conozcamos por este nombre, la realidad es que María Antonieta nunca llegó a tener el collar. De hecho, el destino quiso que fuera separado y vendido por piezas a distintos compradores.
Hoy en día no podemos disfrutar del collar original, pero su popularidad como una de las joyas más famosas del mundo provocó que se hiciera una reconstrucción en Francia de este collar con nada menos que 648 diamantes.
No todo iban a ser diamantes en esta lista, ya que si hablamos de joyas históricas y joyas famosas, no podemos olvidarnos de la perla más famosa: La Peregrina.
Su fama se debe a su gran tamaño junto a su perfecta forma de lágrima, que la dota de una simetría y belleza increíbles. Se descubrió en Panamá alrededor del siglo XVI, perteneciendo originalmente al rey Felipe II y posteriormente a María Tudor. Otras figuras históricas que la poseyeron fueron, Napoleón III, Eugenia Montijo o Elizabeth Taylor, entre otros, de ahí su nombre.
El collar más caro del mundo bien merece ser mencionado en esta lista de joyas famosas. L/Incomparable ganó el Récord Guiness en 2013 al valorarse en 55 millones de dólares. Obviamente, no es un collar de oro y plata, sino que está formado por un diamante amarillo del tamaño de un huevo, junto con otros 90 diamantes blancos, con un peso total de 407 quilates.
La historia de su gran diamante amarillo es bastante curiosa, ya que fue encontrado por una niña en un basurero de El Congo. Parece irónico que el collar más caro del mundo esté formado por un diamante encontrado en la basura.
A lo largo de la historia, ha habido joyas con distintos tipos de piedras preciosas que han quedado para la posteridad, bien por su valor material, histórico o por su historia apasionante. Espero que este artículo te haya parecido interesante, y si tú también quieres que tus joyas sean históricas, más te vale saber cómo guardar joyas de forma correcta.
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