La evolución está impresa en la genética de Jael desde sus primeros pasos, hace casi treinta años. Sin embargo, hay períodos en los que este impulso se acelera, momentos clave en el desarrollo de una empresa. La apertura de la joyería en A Coruña, en 2015, fue con seguridad uno de ellos. La radical reforma de nuestro punto de venta en Santiago, que estrenamos estos días, marca sin duda un antes y un después para nosotros.